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Tips Deco: el truco del rojo inesperado
La propuesta del rojo inesperado consiste en añadir algo de color rojo a una habitación, en la que genere un efecto disruptivo y mejorador inmediato.
Es un recurso para modernizar, elevar y añadir interés a un espacio en el que es poco previsible. Por ejemplo, en detalles pequeños como los tiradores de un mueble, el marco de un espejo, una lámpara de lectura o un florero.
Por supuesto, almohadones y mantas siguen siendo una buena opción, pero podemos optar, además, por lámparas, obras de arte, cabeceros y muebles.
Pero, ¿qué hay que tener en cuenta antes de empezar a inyectar notas rojas en la decoración? Se trata de dar un toque con un elemento contundente, un solo elemento que, si es sorprendente, todavía mejor. El protagonismo se dará por contraste cromático, no hace falta enfatizarlo.
Es importante coordinarlo bien con los colores que lo rodean, ya sea por contraste, como un fondo blanco, o con colores que hagan match, aunque también sean colores potentes, como por ejemplo el morado o el fucsia.
Un recurso muy potente y que puede realzar ese rojo inesperado es una buena pieza de arte.
Es clave la importancia de una buena iluminación en el ambiente, que aporte toques puntuales de luz donde se necesite, tanto al rojo como a todos aquellos elementos que queremos destacar. Un poco de escenografía en el espacio puede crear un efecto final a la vez impactante y agradable.
